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domingo, 6 de junio de 2010

La mejor manera para formar niños buenos es hacerlos felices



Cuando hablamos de nutrición, no necesariamente nos referimos a la parte alimenticia y/o cuidados físicos que debe de recibir el niño, sino también a la nutrición emocional que este requiere, durante los primeros años de vida, influye positivamente la afectividad hacia el niño, esta afectividad permitirá moldear la personalidad (de manera positiva o negativa)para su vida. en la pre adolescencia este grado de afectividad ayudará a la adquisición de autoestima, confianza y seguridad hacia sus padres. Conforme al desarrollo evolutivo del niño, éste necesitará de una conexión que requiere que sea escuchado y visto, de esta manera se logrará una comunicación adecuada que será muy útil para los padres principalmente en el período de la adolescencia. Por los diferentes motivos que influyen en los descuidos de la crianza de los niños, es importante saber demostrar afecto incondicional y si por diversos motivos poseemos poco tiempo para compartir con ellos, ¡aprovechemoslo!. No sigamos siendo culpables de la destrucción de hogares.

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