Muchas veces como padres o maestros, nos sentimos descontrolados y algo desubicados frente a la conducta inadecuada del niño, pensamos que no podremos con ello y nos damos por vencidos descuidando al mismo en un 100%. Hay varias opciones frente a esta situación. La primera es construir buenas bases en los niños para no modificar una conducta inadecuada mas adelante. La segunda es seguir las instrucciones de un especialista, y en el caso de los maestros es indispensable, saber, conocer y manejar las técnicas de modificación de conducta en el niño. Como docentes es bueno tomar en cuenta que todos los niños reaccionan diferente frente a un determinado estímulo, por ello, sus conductas serán diferentes. Debemos de ser más cuidadosos aún cuando diagnosticamos una técnica de modificación a un niño en particular, debido a que el hecho de seleccionar una técnica inadecuada puede llegar a empeorar la conducta de él.
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